Las cofradías encajan mal esta orden ya que les privaría de contar con material gráfico de sus cultos y actos cuaresmales
Una mala decisión en un mal momento. Así podría calificarse la última orden que el Obispado de la Diócesis de Cádiz y Ceuta ha transmitido a los templos de su jurisdicción. Y es que atendiendo a criterios culturales y de conservación del patrimonio ha pedido a los párrocos que prohíban la toma de fotografías en el interior de los templos. Esta medida no es sólo aplicable a los turistas que entran con sus móviles, si no también a todos los medios de comunicación, generalistas y cofrades que cubren la información cofrade de la ciudad, así como a todos aquellos fotógrafos profesionales y aficionados que año tras año dan testimonio de los montajes de cultos que las hermandades realizan con tanto esmero y trabajo.
Las cofradías y hermandades de la diócesis serían también la otra parte perjudicada de esta polémica decisión. Y es que estas fotografías que hacen los fotógrafos pasan a formar parte de su archivo, para después ser utilizadas en publicaciones como boletines, revistas y redes sociales.
La Parroquia de Santa Cruz ha sido la primera en acatar esta orden del Obispado con un cartel que avisa de la prohibición. Si bien el párroco nunca se ha caracterizado por ser muy amigo de los fotógrafos, en este caso el cartel se basa en una orden directa del Obispado.
Todo esto ocurre en una semana donde las cofradías y hermandades de la ciudad comienzan a celebrar los actos de cuaresma. Por ejemplo esta semana celebran sus cultos las hermandades de Las Penas, Prendimiento, Columna, Cigarreras, Sentencia y Medinaceli (precisamente en Santa Cruz), además del Nazareno de la Humillación y el Cautivo de San José. ¿No podremos tener fotos de estos cultos? ¿Los montajes que hagan las hermandades con tanto esfuerzo y dedicación solo podrán verse en vivo? ¿No quedarán imágenes para el recuerdo?
La reacción de las cofradías
Son varias las cofradías que de forma individual han mostrado su rechazo a esta medida. No tenemos constancia de que hayan trasladado este malestar al Consejo, el ente que las representa, pero podemos adelantar que el Obispado está abierto al diálogo y ha convocado a las hermandades «pronto» para tratar este asunto. A día de hoy no hay fecha fijada.
En todo este asunto está pendiente de conocerse la postura del Consejo y cómo actuará para salvarguardar la posición de las cofradías. También sería deseable que los medios de comunicación cofrades y los fotógrafos se organizasen para presionar junto a las cofradías y deshacer este entuerto generado en el peor momento posible.