La Hermandad de La Paz ha presentado esta mañana un nuevo manto, una media luna, un tul y un aderezo para el fajín
La Santísima Virgen del Amparo de la Hermandad de la Borriquita vuelve a la Parroquia de San José tras haber sido sometida a un proceso de restauración durante tres meses. Estos trabajos han sido realizados por los reconocidos restauradores Álvaro Domínguez y Pilar Morillo.
Se han acometido labores de limpieza en la policromía que han permitido devolver toda su belleza al rostro y, especialmente, a las manos de la imagen.
Con motivo de su reposición al culto, la Santísima Virgen del Amparo estrena una serie de regalos que pasan a incrementar su ajuar. En primer lugar, estrena manto bordado reutilizando las estrellas y el sol-enriquecidas y perfiladas- del antiguo palio de cajón de la Santísima Virgen con incorporación de un bello corazón alado bordado en la técnica de aplicación enriquecida. Todo sobre terciopelo de algodón rojo y ejecutado por el taller isleño Nuestra Señora del Carmen dirigido por José Muñoz. Este ha sido donado por una hermana en agradecimiento por un favor concedido por nuestra Madre.
Además, estrena medialuna diseñada y ejecutada por el orfebre jerezano Toni Falla. Se compone en el centro de un corazón alado coronado y sostenido por dos angelitos. Desde las dos estrellas nace un rosario que pende en el centro en honor a nuestra Patrona, la Virgen del Rosario Coronada, como recuerdo de que fue ante su paso que se eligió el nombre de nuestra Madre. Igualmente es un regalo de otra hermana por la concesión de un favor encomendado a la Virgen.
También luce por primera vez encaje de tul bordado del S.XIX y ha sido donado por el reciente nacimiento del niño Rafael Sánchez Álvarez, hermano de la Hermandad, puesto bajo el manto de la Virgen.
En el fajín muestra un aderezo de fallera de principios del S.XX regalo de una pareja de hermanos.