Poco conocida fuera del círculo devocional gaditano, Nuestra Señora del Poder Divino encarna una representación poco frecuente en la iconografía mariana
El próximo sábado 10 de mayo a las 21:00 horas tendrá lugar el Rosario Vespertino de Nuestra Señora del Poder Divino por las calles gaditanas, partiendo de la Iglesia de Santiago y siguiendo el siguiente recorrido:
Plaza de la Catedral, C/Compañía, Plaza de las Flores, C/Columela, C/Montañés, Plaza Candelaria, C/Santiago, C/Compañía, Recogida
Una advocación singular: el Poder Divino hecho madre
Poco conocida fuera del círculo devocional gaditano, Nuestra Señora del Poder Divino encarna una representación poco frecuente en la iconografía mariana. Lejos de las imágenes convencionales de ternura y recogimiento, esta Virgen se muestra majestuosa, con porte regio, portando al Niño Jesús en actitud bendicional, como quien entrega la fuerza celestial a quienes acuden a ella con fe. Su sola presencia, en la penumbra dorada del retablo lateral de la iglesia de Santiago, impone respeto y a la vez consuela.
Esta advocación destaca por su nombre, que remite directamente a la omnipotencia de Dios manifestada a través de María. Se trata de una afirmación teológica poderosa: María, como madre del Verbo Encarnado, participa del misterio del poder divino, no como fuente sino como canal de gracia.
La Iglesia de Santiago: santuario de historia y espiritualidad
La iglesia de Santiago, enclavada en pleno casco antiguo de Cádiz, fue erigida en el siglo XVII y ha sido testigo de siglos de vida religiosa y social. Desde sus orígenes, este templo ha estado íntimamente vinculado con la Compañía de Jesús, lo cual marca una impronta espiritual profunda en su arquitectura, liturgia y culto.
En este espacio, Nuestra Señora del Poder Divino no solo es una imagen para contemplar, sino un foco de vida espiritual. Son frecuentes las misas, novenas y actos marianos organizados en su honor, especialmente durante el mes de mayo y en festividades marianas importantes. La devoción ha crecido de forma discreta pero sólida, como una joya oculta que los gaditanos han sabido conservar.
Testimonios de fe y milagros cotidianos
Aunque no se trata de una imagen coronada ni reconocida oficialmente como patrona, los devotos aseguran que la Virgen del Poder Divino ha obrado pequeños milagros cotidianos: sanaciones, consuelos, reconciliaciones. La feligresía le atribuye una especial intercesión en momentos de dificultad, especialmente en situaciones de enfermedad, desempleo o crisis familiares.
Algunos feligreses dejan cartas, flores o exvotos en señal de gratitud. Su presencia se ha vuelto esencial para los fieles del barrio, quienes, al pasar, no dudan en hacer la señal de la cruz ante su imagen o detenerse unos minutos para pedir fuerza en medio del ajetreo de la vida.
Un culto que espera ser redescubierto
Nuestra Señora del Poder Divino permanece aún como un tesoro por descubrir en el rico mosaico de advocaciones marianas andaluzas. Cádiz, tierra de mar y mística, conserva en ella una muestra viva de cómo la fe popular puede mantener viva una tradición en silencio, sin grandes procesiones ni portadas mediáticas