La reliquia de la Beata fue sustraída en octubre del pasado año, y recuperada por la Policía unos días después
En el día de ayer el equipo de mayordomía de la Hermandad de Jesús Caído ha repuesto al culto, en el altar de sus titulares en la Iglesia de San Francisco, las reliquias del Beato Guillermo José Chaminade y de la Beata Adela de Batz; en una vitrina realizada, para su mayor realce y seguridad, por Carlos Benot.
El pasado mes de octubre la reliquia de la Madre Adela fue sustraída del altar de la capilla de Jesús Caído, en la iglesia de San Francisco.. Así lo hizo público la Hermandad de Jesús Caído en sus redes sociales. Al tiempo la Policía Nacional, tras una investigación logró recuperar la reliquia y devolvérsela a la cofradía.
La Hermandad de Jesús Caído recibió en 2017 una reliquia ‘ex ossibus’ del Beato Guillermo José Chaminade, «uno de los mayores regalos que una hermandad Marianista puede recibir».
La entrega de esta reliquia coincidió con el 125 aniversario de la llegada de los Marianistas a Cádiz y los 25 años de la concesión, de forma pionera, del título Marianista a la Hermandad del Caído.
Se trata concretamente de polvo de hueso de la mano derecha de la reliquia del Beato que se encuentra bajo el altar mayor de la Iglesia de Nuestra Señora del Pilar en la curia general Marianista de Roma. Así lo certifica el escrito del Postulador General Marianista, Antonio Gascón Aranda.
El padre Gascón Aranda, predicó la función que celebró la hermandad de Jesús Caído y María Santísima de los Desamparados en la Catedral en el año 2015 con motivo del cincuentenario de la bendición y puesta al culto de la titular, previa a su salida procesional extraordinaria: «Desde aquel momento se hizo patente su gran cariño a nuestra hermandad y su carisma marianista, lo que ha refrendado con este gesto sin precedentes en España, ya que es una de las pocas reliquias que existen y más concretamente la única en la Familia Marianista de Cádiz y provincia.