Juan Carlos Jurado, presidente del Consejo de Hermandades de Cádiz, se muestra «feliz» por la vuelta de los cultos externos, que serán en Semana Santa «con mascarillas y el mismo recorrido de siempre en la Carrera Oficial»
Lee la noticia en La Voz de Cádiz
RUBÉN LÓPEZ| Las procesiones de Semana Santa fueron prácticamente la primera festividad o celebración popular que la pandemia borró de la sociedad. El confinamiento, en plena cuaresma de 2020, echó al traste las ilusiones y los trates de miles de cofrades que por esa época viven con mayor intensidad que nunca una celebración que trasciende la fe y va más allá de la religiosidad popular. La Semana Santa y sus pasos en las calles forman parte del ADN andaluz y por ende de muchos gaditanos que vieron como no solo un año, sino dos, sus pasos y devociones se quedaron en sus templos.
Procesiones que no Semana Santa, pues ésta siempre ha existido y nunca se podrá eliminar. De hecho, todo lo vivido en la Cuaresma y Semana Mayor de 2021, con colas en los templos para admirar los altares y disposiciones de las cofradías, no ha hecho más que «aumentar la devoción de los gaditanos que se han acercado con más ganas que nunca para mostrar su fe».
Lo dice un hombre que es más feliz que nunca. Juan Carlos Jurado, presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías de Cádiz, representa la voz de muchos gaditanos que esta semana respiraban hondo y sonreían al mismo tiempo al comprobar que sí, que los cultos externos serán, si Dios quiere, una realidad en 2022.
«Estoy muy contento y feliz de poder volver a que nuestras imágenes salgan a la calle y mostrar nuestra religiosidad y poder llevar a cabo nuestra tarea evangelizadora en el exterior. Queremos expresar nuestra libertad religiosa, ya nos tocaba. Todo el mundo menos nosotros lo ha podido hacer hasta ahora porque hemos sido muy prudentes y hemos sabido esperar», expresa Jurado.
Prácticamente 18 meses sin procesiones en la calle hasta que la Patrona, la Virgen del Rosario, las recupere el próximo 7 de octubre en la capital. «Han sido dos años muy largos. Ahora mismo tenemos la cautela hasta que en diciembre comprobemos como está la situación. Si está como ahora los técnicos del Ayuntamiento son optimistas para que toda la Semana Santa se pueda llevar a cabo como siempre».
La Carrera Oficial no se toca
Al respecto, el presidente de la Permamente destaca que las medidas previstas son, a día de hoy, que la mascarilla se siga llevando al menos en la Carrera Oficial. «Quizás no sea necesario guardar distancia de seguridad sin son convivientes pero la reocmendación a día de hoy es que la gente que esté en esa zona sea con mascarillas». Recomendaciones a día de hoy pues esto es muy cambiente. En caso de empeorar, el Consejo y el Ayuntamiento trabajan en situaciones alternativas. «Si la pandemia volviera con fuerza habría que cambiar itinerarios por calles más anchas pero a día de hoy es una Semana Santa normal con la misma Carrera Oficial que se aprobó en 2017, con la novedad de los nuevos palcos en San Juan de Dios y Catedral».
Aunque el recorrido común para todas las hermandades será el mismo, desde el Consejo se dará recomendaciones a las cofradías para sus itinerarios de ida y regreso. «Hemos trabajado en una Semana Santa con normalidad pero los itinerarios tendrán una serie de recomendaciones, habrá cofradías que podrán cumplirlo y otras que no». ¿Cuáles? «Hoy en día las recomendaciones son caminar por calles anchas pero si la incidencia sigue bajando no serán necesarias», apunta.
Cargadores con mascarilla y PCR
Las recomendaciones van más allá de los itinerarios y los espectadores en la calle. Los cargadores serán otros que tendrán que cumplir una serie de requisitos, al menos en estos primeros meses. Otra cosa será cuando se aproxime la Semana Santa y se vea cómo está la incidencia del coronavirus por entonces.
Juan Carlos Jurado destaca que «ahora mismo los cargadores debajo de un paso deben llevar mascarilla e incluso hacerse una PCR o un test de antígenos antes de estar debajo del paso». El presidente de la Permanente habla tambíen de «cuadrillas burbuja» en el que caso de que sean convivientos o formen parte del mismo círculo. Una situación que, no obstante, se sigue estudiando a día de hoy, pues por la forma de carga en Cádiz es complicado que pueda existir distancias de seguridad y otros requisitos debajo de un misterio o un palio.
La Semana Santa de Interés Turístico
Con todo, los dos años sin procesiones ha conllevado una merma lógica en la economía de las hermandades que se ha compensado con la enorme devoción que ha crecido. «En estos dos años la pandemia ha afectado. Ha existido una merma económica pero no hemos hecho valoración de ello, las hermandades han perdido parte de la subvención pero han aguantado bien gracias a la aportación del Ayuntamiento de Cádiz. Las cofradías han hecho una labor importante de caridad y lo importante es que se siga haciendo«, asevera.
«Creo que hemos ganado en devoción porque la gente estaba muy necesitada. Si todo sigue bien espero que la gente nos apoye, nos siga y nos ayuda. Necesitamos mucho de las imágenes, lo hemos probado en la última Semana Santa».
La primera piedra en este largo camino la puso la Virgen de la Soledad de Arcos de la Frontera que dejó imágenes que nos recordaban a cualquier Semana Santa de otros años. «Sentí satisfacción por ver una imagen en la calle y te emociona como sucedió en Arcos. Desde primeros de marzo de 2020, son 18 meses sin una procesión en la calle».
El gran proyecto de la Semana Santa de Cádiz es que sea declarada de Interés Turístico Nacional. El Consejo y el Ayuntamiento llevan dos años trabajando de la mano en un camino que parece estar cerca de un final feliz. «Espero que la del 2022 sea de la declaración de Interés Turístico Nacional. Se lo hemos pedido a la Junta de Andalucía. Son dos años trabajando y esperamos que a final de este año se pueda llevar a cabo».
Jurado espera que el Ministerio de Turismo «lo apruebe pronto. Antes, la Junta tiene que revisar la documentación, el Ayuntamietno celebrará un pleno para aprobarlo y a partir de ahí la Junta lo mandará al Ministerio», concluye.